Lectora de GipuzkoaDigital.com le escribe a la autoridad

Koro A, de la Parte Vieja se queja de como el turismo está cambiando los rasgos y esencia de una ciudad como Donosti, y como se tienen que tomar medidas para que no nos dejemos vencer a la primera de cambio. Son muchos los emprendedores y autónomos que viven para ofrecer calidad al turismo, a estos hay que ayudar.

Una feligresa de la parroquia de San Vicente en Donostia San Sebastián le escribe a la autoridad:

«En la iglesia de San Vicente – estilo gótico tardío 1507 – se ha colocado un cartel feísimo, de obra, para que el turista no acceda al altar, lo nunca visto en Donosti, ¡que horterada!. Después de ver como en Barcelona o Amsterdam ya se están tomando medidas para controlar el efecto del turismo masivo, aquí ponemos esos carteles como los que se ponían en la Catedral de Sevilla en los años 80.

Grandes críticos gastronómicos donostiarras ya están avisando del peligro que tienen la cantidad de bares nuevos en la Parte Vieja que ofrecen sin compasión pintxos de txaka con mayonesa al turista despistado.

La autoridad tiene que controlar y educar al turismo para que una ciudad como Donosti siga teniendo su propia identidad y no la pierda. Que el turista reciba un buen trato y se de cuenta que somos una gran ciudad acogedora.

Que quiten ese feísimo cartel de los escalones del Altar Mayor de San Vicente y pongan unos postes separadores con un cordón a modo de cíngulo, para que el turista poco viajado no entre el Altar, como los que tienen ahora las catedrales e iglesias de allí abajo.»